Un doblete de Arruabarrena otorga una merecida victoria a un
notable Eibar, que cuajó una magnífica primera parte y tumbó Deportivo, el primer clasificado y el menos goleado
EIBAR: Xabi; Bóveda, Raúl Navas, Arregi, Kijera; Diego Rivas
(Diego Jiménez, m. 71), Dani García; Jota, Arruabarrena, Morales (Errasti, m.
58); y Gilvan Gomes (Capa, m. 81).
DEPORTIVO de la CORUÑA: Lux; Laure, Marchena, Kaká, Manuel
Pablo (Luis Fernández, m. 72); Álex Bergantiños, Juan Domínguez; Seoane
(Antonio Núñez, m. 77), Culio (Rudy, m. 85), Luisinho; y Borja.
Árbitro: José María Sánchez Martínez (Comité murciano). Amonestó
a Culio y Luisinho, del Deportivo, y a Gilvan y Errasti, del Eibar.
GOLES: 1-1, m. 39: Arruabarrena. 2-0, m. 84. 2-1, m. 89:
Luis Fernández.
Jota Peleteiro fue titular por segunda semana consecutiva |
Antes del partido quedarían pocos aficionados al fútbol que
pensaran que la fulgurante trayectoria del Eibar radica en la animosa entrada
en la nueva categoría de un recién ascendido. Que todo era fruto de la ilusión
del novato, pero después de la merecida victoria de ayer ante todo un Deportivo
que no visitaba desde hacía 23 años Ipurua, ya no quedará quien no reconozca
que este Eibar dispone de una plantilla corta, pero competitiva para al menos
alcanzar su meta de la permanencia sin excesivos apuros. El cuadro armero fue
quien frenó la racha del Deportivo, que era el conjunto más en forma de la
categoría, el que acumulaba seis jornadas consecutivas sin conocer la derrota y
el menos goleado.
Como adelantamos en la previa, Garitano realizó una mini revolución
en el once inicial. Bóveda y Kijera ocuparon el lateral derecho e izquierdo
respectivamente como estaba previsto, pero la sorpresa vino al ser Arregi el
que acompañó a Navas en el centro de la zaga. Dani García regresó al once y
estuvo acompañado por Diego Rivas, ya que Errasti calentó banquillo de inicio.
La punta de ataque fue para el brasileño Gilvan Gomes.
El Eibar ya demostró que estaba excitado ante la presencia
del líder desde unos eléctricos primeros minutos del choque. Laure lanzó un
chut cruzado desde el interior del área que atajó Xabi en la primera ocasión
del Deportivo. El Eibar respondió al siguiente minuto mediante un lanzamiento
lejano de Gilvan Gomes que atajó Lux. Pero pronto comenzó el Eibar a gobernar
el partido y casi monopolizó el control del balón. Arruabarrena cabeceó fuera
por poco un centro de Bóveda, que se sumó al ataque con frecuencia en una
completa primera mitad. Poco después, el propio lateral diestro llegó hasta
línea de fondo dejando atrás a varios rivales, pero Morales no pudo rematar su
servicio. Todo un Deportivo estaba siendo sometido por el humilde Eibar y
alguno no lo supo asimilar.
Perdona la roja a
Culio
Culio asestó un codazo claro que el árbitro rebajó a
amarilla, en una acción en la que le perdonó una expulsión clara. Desde luego
un agravio si comparamos la que sufrió injusta tarjeta roja directa que sufrió
Yuri Berchiche la semana pasada. Pero ni eso desanimó a un brioso Eibar que,
dirigido por un majestuoso Dani García, regalaba momentos de juego preciosista
con un Jota voluntarioso pero no siempre atinado. La del minuto 30 fue una
buena muestra. Jota abrió a la parte izquierda del área para Morales, que metió
un preciso centro a Arruabarrana. El tolosarra remató en boca de gol aunque
escorado, pero su volea fue excesivamente cruzada. Pero poco después logró sacarse
la espina el delantero guipuzcoano, que inició otra jugada abriendo a la banda
izquierda hacia Kijera. El hernaniarra centró y tras un rechace Arruabarrena
enganchó una estética volea desde el borde del área que batió a Lux. Algarabía
en Ipurua por el golazo que hacía justicia al mejor juego armero.
Como era de esperar, el Deportivo adelantó las líneas en la
segunda parte y comenzó a demostrar el porqué es el líder de la Segunda
división. Culio y Luisinho empezaron a entrar más en contacto con el juego ante
un Eibar que enseguía perdía el balón. Garitano hizo un sorprendente cambio al
retirar a Morales, que estaba siendo una pesadilla para la zaga deportivista, e
introdujo Errasti en una permuta de talante conservador. Fue entonces cuando el
dominio territorial del Deportivo se acrecentó y puso en muchos aprietos con
constantes internadas y envíos al área por las bandas. Bergantiños y Juan
Domínguez tomaron la batuta y el partido era del Deportivo. Pero ahí respondió
de manera sobresaliente la novedosa defensa armera, que estuvo formidable y
demostró el fondo de armario de la plantilla. Culio puso un centro que llevaba
peligro pero Xabi atrapó el esférico. Tras la retirada de Morales, el Eibar
había dejado sólo a Gilvan Gomes y Jota, y así quedaba desactivada la opción de
sentenciar el partido al contragolpe. La solución de Gaizka fue sacar a Diego
Jiménez, el calvo jugón, con lo que se restableció el equilibrio del equipo.
Aunque mandaba el Deportivo, el Eibar destilaba tranquilidad y parecía confiar
en la victoria. Raúl Navas salió desde la defensa con el balón jugado de manera
elegante en una acción aplaudida a rabiar.
Jota
gozó de una ocasión al contragolpe para sentenciar, pero cuando iba a chutar se
cruzó el internacional Marchena. Con un Deportivo cada vez más adelantado,
llegó la obra de arte de Dani García, que metió un pase de unos 50 metros
medido al demarque de Gilvan Gomes. El brasileño se metió en el área y cedió a
Arruabarrena, que empujó el esférico a puerta vacía. Luis Fernández acortó
diferencias en el último minuto al rematar en boca de gol un centro desde la
derecha de Núñez, pero nada iba a impedir la fiesta guipuzcoana
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