Fran Garagarza vive su segundo play-off como secretario
técnico del Eibar. El mutrikuarra valora la clasificación lograda ante el
Alcoyano, analiza la situación del Eibar, halaga a Diego Jiménez y Jito, y
vaticina una eliminatoria abierta ante el Oviedo en la segunda ronda
¿Sufrió mucho el
pasado domingo?
Uff, demasiado, pero es lo que hay en esta fase final. Fue
una pena porque en la primera parte podíamos haber decantado a nuestro favor la
eliminatoria. El Alcoyano no arriesgó nada en el primer periodo, pero en la
segunda adelantaron líneas y nos apretaron, como era de esperar.
¿Qué pensó cuando
llegó el gol visitante que dejaba en la cuneta al Eibar?
Que quedaba tiempo para darle la vuelta. Hombre, el cuerpo
técnico tuvo una reacción de alabar. Se hizo un cambio de sistema y se hicieron
tres remates, uno de Guille, otro de Mainz y otro de Jito al margen del gol de
Diego Jiménez. El equipo demostró tener variados recursos en ataque.
Como ya hizo con
aquel gol en el tiempo de descuento ante el Noja, Diego Jiménez rescató al
Eibar cuando ya parecía que se decía adiós en el play-off. ¿Qué le dice que un
jugador que no es titular sea el que haya otorgado el pase con ese gol de
bandera?
Diego, cuando ha jugado, ha dado un rendimiento alto. Quizás
podía tener más minutos, pero es buena señal de que los que están jugando en su
misma posición lo están haciendo muy bien. Pero Diego ha demostrado ser una
gran persona y profesional. No ha puesto una mala cara y ha estado empujando al
equipo, sonríe hasta con el entrenador.
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| Fran Garagarza sigue un entrenamiento en Unbe acompañado a su izquierda de Erik Bretos, su ayudante |
En esta plantilla todos son importantes aunque jueguen un
solo minuto. Por el ritmo que metemos al juego necesitamos una plantilla de 22,
no de 12. Rubén no está ahora, pero tenemos alternativas. Si no fuera por esta
plantilla, no habríamos llegado a nada. Si hemos llegado hasta aquí y estamos haciendo una temporada tan buena es por la implicación de todos y también de gente que juega poco y cuando lo hace rinde, como Bingen, Diego, Guille, etc.
¿La diferencia
respecto a los dos años anteriores ha radicado en que el Eibar marcó en el
partido de ida?
No necesariamente. Está claro que es muy importante marcar
un gol fuera y el Eibar va a mantener en Oviedo la identidad de todo el año y
buscará la meta contraria. Pero también ha habido equipos la pasada ronda que
han pasado sin marcar a domicilio como hizo el Huracán de Valencia. No por no marcar fuera, ya estás automáticamente
eliminado.
Otro jugador que no
ha jugado mucho es Jito, que casi marca de cabeza a un centro de Diego Jiménez.
¿No le da la sensación de que merecía jugar más minutos?
El trabajo que está realizando Jito es para enmarcar. Aunque
de puertas hacia fuera no lo parezca, para el club y para el cuerpo técnico es
un jugador fundamental. Jito es el que más anima, ayuda a todos en los
entrenamientos y cuando sale al campo, también aporta. En el día a día, es el
jugador más importante de la plantilla.
El próximo rival es
el Oviedo, una entidad histórica que no puede aplazar más su regreso al fútbol
profesional. ¿Se siente vértigo ante el nombre?
Este equipo no tiene miedo, porque eso sería perjudicial. Sí
tenemos respeto porque es un gran club y la plantilla está confeccionada para
ascender. Llevan tiempo queriendo lograrlo y se están volcando en el objetivo. En
este sentido, nos tenemos que basar en los partidos de Copa jugados por el
Eibar esta misma temporada en San Mamés y La Rosaleda. No va a ser la primera
vez que vamos a jugar ante 25.000 espectadores, los jugadores saben qué
ambiente se van a encontrar en el Carlos Tartiere y se saben desenvolver en
este tipo de escenarios. El Tartiere no nos va a amedrentar. A partir de ahí, es una pugna de once contra once.
Hemos sido un equipo con personalidad todo el año, creemos en nuestras ideas y
vamos a ir a por todo con las mismas.
¿Cómo espera que sea
la eliminatoria?
La veo enormemente igualada. Los partidos en la fase de
ascenso suelen ser cerrados y con pocas ocasiones. Los resultados son exiguos y
casi nadie gana por mucha diferencia. La excepción en la anterior ronda fue el
Huracán.
Casares (ex del
Alavés), Aitor Sanz e Iker Alegre (ex del Real Unión) o Diego Cervero (ex U.D.
Logroñés) con 22 goles. ¿Qué le dicen estos nombres?
Me
parece que el Oviedo es un club con un presupuesto alto pese a los problemas
económicos y que tiene una plantilla de calidad con jugadores experimentados.
Diego Cervero es un líder y un referente
para ellos. Está motivado jugando en su ciudad y juegan para él.
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